Los indicadores sectoriales publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) sugieren un crecimiento del Imacec para el mes de junio cercano al 4%, cifra que será confirmada por el Banco Central en su anuncio programado para este viernes. Si estos datos se sostienen, estaríamos ante el crecimiento más significativo registrado en lo que va del año, impulsado por diversas razones. Entre ellas, destacan las bajas bases de comparación y la existencia de un día hábil adicional en junio de 2024, así como la normalización de las actividades manufactureras que fueron interrumpidas el año pasado y el dinamismo que continúa mostrando el sector comercio.
Sin embargo, se anticipa que este crecimiento positivo no se mantendrá a lo largo de los meses venideros. Para julio, las bases de comparación se tornan más exigentes en varios sectores, y la cantidad de días hábiles es la misma que el año anterior. Además, algunos factores que favorecieron la producción en junio, como la reactivación post-pandemia y el aumento en las ventas de ciertos sectores, ya no estarán presentes. Se prevé, por tanto, un crecimiento más moderado, estimándose que estará por debajo del 3%.
En el ámbito del comercio minorista, el desempeño de los bienes durables ha sido notable, con un crecimiento del 11%, muy por encima del 4,5% correspondiente a los bienes no durables. Los sectores automotriz, de electrónica y tecnología, así como el equipamiento para el hogar, son los que destacan en esta tendencia. Sin embargo, el consumo de alimentos y bebidas ha mostrado señales de debilidad, con una contracción del 1% en las ventas de supermercados, lo que es un indicativo de un posible cambio en los hábitos de consumo de los ciudadanos.
Por otro lado, el comercio en línea continúa su ascenso, manteniendo tasas de crecimiento de dos dígitos. Durante los primeros meses de 2025, el e-commerce ha registrado un incremento del 12,8% en términos nominales, acumulando cerca de un 13% en lo que va del año. Esta tendencia sugiere que los consumidores están cada vez más dispuestos a adoptar plataformas digitales para sus compras, un cambio que ha llegado para quedarse en el comportamiento de consumo en el país.
No obstante, el trasfondo más preocupante de estos datos es el débil desempeño del mercado laboral. A pesar del crecimiento proyectado, se ha confirmado un estancamiento en la creación de empleo durante el segundo trimestre, exacerbado por las nuevas cargas regulatorias que han incrementado los costos de contratación. Estas condiciones son alarmantes y podrían empeorar aún más en los próximos meses, sobre todo con la entrada en vigor en agosto de una cotización adicional del 1% que recaerá sobre los empleadores, en el marco de la Reforma de Pensiones. Se espera que el Gobierno aborde esta situación pronto, considerando el impacto previsible sobre el empleo, algo que hasta ahora no se ha vislumbrado.








