El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) ha divulgado este miércoles su más reciente informe sobre el Índice de Precios al Consumidor (IPC), revelando que la inflación de septiembre cerró en un 0,4%. Esta cifra ha mantenido la sintonía con las previsiones realizadas por economistas y analistas del ámbito financiero, quienes anticipaban un registro similar. Javier Mella, académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Aplicadas de la Universidad de los Andes, comentó que «la variación de precios acumulada en 12 meses ha llegado al 4,4%», lo que representa un alejamiento respecto al valor meta establecido del 3%. Este informe señala que el mes anterior se había registrado una variación nula, lo que hace aún más relevante el incremento observado ahora.
Dentro de las categorías que más influyeron en esta variación, destaca la división de Alimentos y bebidas no alcohólicas, que fue responsable de casi la mitad del aumento, con un incremento del 0,8%. Otras categorías que también mostraron cambios incluyen Recreación, Vivienda y Servicios básicos, así como Restaurantes y Alojamiento. Mella explica que, aunque estas variaciones son esperadas en un mes como septiembre, se contrastan con lo que se observó en el mismo mes del año anterior, donde los incrementos habían sido considerablemente moderados.
En cuanto a los productos con mayores aumentos, se registraron incrementos significativos en tomates con un 19%, el transporte en bus interurbano con un 12,8%, juguetes con un 9% y zapallos con un 8,9%. Sin embargo, no todo son malas noticias, ya que en el rubro del transporte aéreo internacional se reportó una baja relevante del 9,4%, un ítem conocido por su volatilidad. Adicionalmente, se observó una baja del 0,4% en el precio de las gasolinas, lo cual es una buena señal para los consumidores y podría ayudar a moderar la inflación en el futuro cercano.
Ante esta situación inflacionaria, el académico Javier Mella aseguró que las expectativas en torno a la inflación no deberían verse alteradas por este dato puntual. De hecho, se anticipa que para el mes de octubre la inflación se sitúe en alrededor del 0,3%, lo que podría seguir alineando las proyecciones a dos años con el objetivo del 3% establecido por las autoridades. Este comportamiento del IPC es crucial para la salud económica del país, ya que la estabilidad en los precios es fundamental para el crecimiento sostenido.
Finalmente, Javier Mella también se refirió a las expectativas en relación a la Tasa de Política Monetaria del Banco Central, sugiriendo que podría haber una nueva baja de 25 puntos base en alguna de las reuniones programadas para lo que queda del año. Esta reducción en la tasa, si se lleva a cabo, podría contribuir a estimular la economía y ayudar a mantener la inflación dentro de los parámetros deseados, brindando a los consumidores y a las empresas un respiro en medio de un panorama inflacionario que continúa siendo motivo de preocupación.