El sistema eléctrico chileno se compone de tres actores principales. Uno de ellos es el encargado de trasladar la energía generada localmente a raíz de distintas fuentes, de un lugar a otro. Esto garantiza el acceso a la electricidad a localidades tan remotas como Chiloé, que próximamente será protagonista de un nuevo hito para la transmisión: el proyecto Tineo-Ancud.
La Política Energética Nacional 2050 del Ministerio de Energía es clara. Además de lograr una matriz energética más limpia para ese año, hay cuatro pilares fundamentales en los que se debe trabajar: Confiabilidad, Inclusividad, Competitividad y Sostenibilidad.
Esto se traduce en crear un suministro seguro y de calidad, en posibilitar que la energía sea un motor del desarrollo, en que la energía sea compatible con el medio ambiente y en que se motive a la eficiencia energética de la mano de la educación.
Pero, ¿quiénes intervienen en este proceso? Además de las autoridades y otros actores sociales, una labor importante es la que cumplen aquellos que participan directamente en el funcionamiento del sistema eléctrico.
Por un lado están las generadoras, empresas que se encargan de captar la electricidad desde diferentes fuentes como la solar, eólica o hídrica. Por otra parte están las distribuidoras, a cargo de llevar la energía a cada uno de los hogares.
Sin embargo, hay un actor intermedio que no muchas veces es mencionado. Se trata de las transmisoras, empresas que hacen el nexo entre la generación y distribución, es decir, que trasladan la electricidad por largos tramos desde el lugar donde se genera hasta donde se distribuirá.
En Chile, al tratarse de un país largo y lleno de cadenas montañosas, la labor de transportar la energía no es algo tan simple, considerando que la generación se concentra en ciertos lugares del país.
Contribuyendo al acceso energético
Uno de los objetivos de la mencionada política de energía es garantizar el acceso universal y equitativo a servicios energéticos modernos, confiables y asequibles para toda la población de aquí a 2050. Para que esto ocurra, la labor de la transmisión es vital, ya que es la responsable de movilizar toda la electricidad del país.
Esto se logra a través de redes construidas en base a subestaciones y torres de alta tensión que cruzan todo Chile respetando los protocolos ambientales impuestos y fiscalizados por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA).
“Este sistema funciona como una gran carretera encargada de movilizar toda la electricidad necesaria para el desarrollo del país. A pesar de que hemos avanzado en la expansión de estas vías, aún falta camino por recorrer para cumplir los objetivos de cara a 2050”, explica Marcelo Concha, jefe de proyectos de Transelec, empresa transmisora que tiene un 84,9% de participación en el Sistema Eléctrico Nacional.
Según datos publicados en el Mapa de Vulnerabilidad Energética, 24.556 viviendas del país no tienen acceso a energía eléctrica y 5.086 lo tienen de forma parcial. De ese número, las regiones más afectadas son Los Lagos, Araucanía y Coquimbo. Sin duda, la transmisión cumplirá un papel importante a la hora de resolver esto.
Seguridad en el suministro eléctrico
Uno de los requerimientos más importantes en términos eléctricos a nivel país es garantizar un suministro con la menor cantidad de fallas.
Para permitir un servicio más estable, pueden generarse varias líneas de transmisión en un mismo lugar, lo que genera respaldo o redundancia, medida en “n”. Por ejemplo, en Santiago existe n-3, lo que quiere decir que además de la línea principal, existen otras tres operativas.
¿Cómo ayuda esto? Su labor es actuar como un respaldo en caso de fallas en la línea principal. Si se corta su energía, por el motivo que sea, existen otras tres que pueden reemplazarla y dar seguridad de que el suministro ciudadano no sufrirá interrupciones.
Fomento en la generación local de energías renovables
Sin embargo, uno de los mayores potenciales que tiene la transmisión pensando en los objetivos de Energía de cara a 2050, es posibilitar la generación de energías renovables en más lugares de Chile.
Actualmente, de las plantas debidamente inscritas que tienen una potencia de generación mayor a 100 kW/s, la gran mayoría se concentran principalmente en las zonas norte y centro del país, lo que claramente instaura una situación desigual respecto a los territorios más australes.

Esto se explica básicamente porque la generación de Energías Renovables No Convencionales (ERNC), habitualmente se hace a través de sistemas solares, más desarrollables en zonas despejadas como la nortina. Sin embargo, al sur del país existen condiciones claras como para establecer plantas eólicas o hidroeléctricas.
Para que exista un mayor trabajo en zonas desprovistas de generación de ERNC, la construcción de una mayor cantidad de líneas de transmisión puede motivar a que más empresas decidan invertir en la construcción de plantas cercanas a localidades que necesitan un mejor acceso eléctrico.
Una mejora para Los Lagos: El proyecto Tineo-Ancud
En este momento hay varios proyectos que se están desarrollando en el ámbito de la transmisión, pero uno de los que más destaca es la nueva línea de alta tensión en estudio para la Región de los Lagos.
Se trata de una red de 251 torres de alta tensión que unirá dos nuevas subestaciones (Tineo y Nueva Ancud), y que recorrerá seis localidades desde Llanquihue hasta Ancud. Su objetivo es robustecer el actual sistema de transmisión de la zona y generar redundancia, lo que como se mencionó anteriormente, otorga más seguridad en el suministro eléctrico.
“Las autoridades de Energía han previsto un colapso del trazado eléctrico de esta zona en cinco años, lo que podría causar problemas al suministro eléctrico de localidades como Chiloé. Para evitar esto, Transelec construirá una nueva y moderna línea encargada de traer más electricidad a esta parte del país”, comenta Marcelo Concha.
Su construcción está planificada para el primer semestre de 2022, siempre y cuando se obtenga la aprobación ambiental por parte del SEA. De ser así, la instalación de las nuevas torres de alta tensión y las subestaciones estaría completa en 2024.
Toda la información del proyecto, como objetivos, su trazados, cronogramas y aspectos ambientales los puedes encontrar aquí.